miércoles, 19 de junio de 2013

¿Peregrinos, o Camineros...?


¿PEREGRINO... o CAMINERO?


PEREGRINO
(De la REAL ACADEMIA DE LA LENGUA)
1. adj. Dicho de una persona: Que anda por tierras extrañas.
2. adj. Dicho de una persona: Que por devoción o por voto va a visitar un santuario, especialmente si lleva el bordón y la esclavina.


¿PEREGRINO... o CAMINERO?

El peregrino es un viajero que visita algún lugar sagrado, casi siempre por motivos religiosos.
Durante la Edad Media cristiana se distinguían tres clases de peregrinos:
  1. Romeros : aquellos que iban a Roma.
  2. Palmeros : aquellos que iban a Jerusalem.
  3. Peregrinos : aquellos que iban a Santiago de Compostela.




El peregrino penitente emprendía el viaje con la esperanza de que se le reduciría el castigo divino. Algunos penitentes llevaban el pecado escrito en una cédula que depositaban en el altar del santuario. Una vez allí y de manera milagrosa se borraba lo escrito.

 

Los peregrinos solían llevar una vestimenta especial, sobre todo en lo que se refiere a complementos, que llegaron a ser todo un símbolo: el zurrón (morral o anapola, bolsa grande de pellejo, que regularmente usan los pastores para guardar y llevar su comida u otras cosas.), el bordón o un bastón, un sombrero de ala ancha, una capa con esclavina y calabaza para almacenar agua o vino. También solían llevar como distintivo la famosa "concha de peregrino" o "vieira, Pecten Jacobeus.”

Llegada de los peregrinos a Santiago.

Después del recorrido por los distintos caminos que existían llegaban a un lugar cercano a Santiago llamado Lavacolla. Allí se lavaban y purificaban, muy especialmente el sexo. De aquí el nombre de Lavacolla, Lavar las Joyas del peregrino.
Subían al Monte del Gozo desde donde ya se veían las torres de la Catedral. Desde allí había una gran carrera por llegar el primero a la Plaza del Obradoiro. El que lo conseguía obtenía el título de “Rey”, con derecho a utilizar la palabra como apellido. De ahí los apellidos de Rey, Roi, Leroi, etc.
Entraban por la Puerta del Camino y seguían por Casas Reales, plaza de Cervantes, (ahí tuvo lugar el único auto de Fe que hubo en Galicia), y Azabacheria. Si era Año Santo, por la Vía Sacra para llegar a la Plaza de la Quintana. Arriba, en la Cruz de los Farrapos (Cruz de los Harapos) se despojaban de las ropas viejas y conseguían las nuevas.
Entraban a la catedral por la Puerta Santa.”






CAMINERO
(De la REAL ACADEMIA DE LA LENGUA.)
1. adj. Perteneciente o relativo al camino.
2. m. y f. adj. Caminante ( el que camina)


¿Que somos los que andamos por el Camino...?
 


Sin lugar a dudas, todos y cada uno de los que hacemos el Camino de Santiago, estamos andando por una ruta milenaria, ruta religiosa y cultural a la vez desde los primeros tiempos, (sin olvidar la necesidad de crear en la península ibérica una fuerza en contraposición al poder islámico del gran califato del Al Andalus) ya sea por cuestiones tan respetuosas como puedan ser la Fe y el Compromiso o Promesa dada o por el simple gusto a la Naturaleza y el gozo cultural que nos ofrece el Camino.

Y no cabe duda alguna que en el inicio de peregrinación de la ruta jacobea contenía esta fuerte condición religiosa y de sacrificio, o por lo menos, la necesidad de destacar la cristianidad enfrente al Islam.
Del sacrificio y de las dificultades de las que ya hablaba, y no bien precisamente, Aymeric de Piacud, cuando en 1130 ya describe la primera “guía del Camino”, en el Códice Calixtino.


Pero hoy en día, y esta es mi posición y mi convencimiento, abierto y respetuoso a cualquier otra posición, tan válida como la que expongo.

Yo no ando de penitente en busca de la reducción del castigo divino, ni llevo escrito mis pecados, que tal vez no tendrían cabida en una hoja escrita, ni ando con la vestimenta especial de un peregrino, aunque la etiqueta del Decatlón y de Quechua este por todas las partes, ni espero a llegar a Lavacolla para lavar mis miserias, que ya no “joyas”, ni me da gozo llegar al Monte del Gozo, tal vez porque me anuncia que mi gozar y disfrute del Camino se ha acabado en cuatro kilómetros....

Por eso, a mi pregunta inicial , ¿PEREGRINO... o CAMINERO? ,y la siguiente de ¿Que somos los que andamos por el Camino...?, me considero sencillamente un Caminero, un caminante, el que camina por el camino que hacemos paso a paso, día a día...

Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.”


En mi último Camino Portugués, al paso por una pequeña población, un rotulo que daba nombre a la calle me llamo la atención, y me dio la conformidad a mis pensamientos sobre el planteamiento de andar por el Camino.
 

Y con todo el respeto y entendimiento al que se considera Peregrino, creo que es un condicionamiento demasiado grande para mi, ya que no voy en busca de nada mas que este disfrute que me da, eso si, el Camino.
Así como el reconocimiento y convencimiento de que las fuerzas desconocidas que en el Camino encuentro, las sensaciones que en él descubro, apagadas dentro de la oscuridad del olvido, las emociones que afloran humedeciendo los ojos y alegrando el corazón, la paz interior a pesar de los dolores de pies, de las joias rodillas, y un cierto estado , si no de religiosidad, si de complicidad con lo espiritual en esta tan especial andadura caminera.
Tal vez el final del Camino sea lo mismo y el mismo para el que considera que peregrinar a Santiago le significa un encuentro o cumplimiento con algo religioso y místico, o para el que solo gusta el andar por el Camino, como en mi caso, para el gozo y disfrute propio.
Y la satisfacción de poder compartir con los que sí son sus sentimientos de hacer el Camino como cumplimiento de promesa, de penitencia o de índole religioso, por la misma ruta que nos lleva a ambos a Compostela.




Y no renuncio a contestar con la respuesta milenaria jacobea, al preguntarme algún peregrino foráneo por la buena ruta hacia el fin ansiado de su andadura, o de su peregrinaje, solo con la diferencia que para mi este fin no es mas que un nuevo inicio de mi caminar, y usando las palabras que a todos nos unen, Peregrinos o Camineros, y que nos hermanan en nuestros pasos.....
 
¡ULTREIA, SUSEIA, compañero !!!





2 comentarios:

  1. Después de una primera toma de contacto como bloggero, buena entrada la que publicas. Bien estructurada y con las fotos justas. Muy bien. Ya iremos hablando para adornarlo un poco más. Pero poco a poco, así está ya estupendo. Enhorabuena.

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  2. Gracias, Maestro...ya sabes, solo sigo tus pasos.

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YO MISMO

YO MISMO
DESCANSO EN EL CAMINO