martes, 23 de julio de 2013

Mi Camino a Santiago Atitlan. 5ª etapa.


Crónicas Guatemaltecas


5ª Etapa y última: SANTIAGO de ATITLAN. 
 (1ª parte)



La cercanía de mi fin de Camino, solo al otro lado del lago, me hacia sentirme con la extraña y difícil sensación que nos acude a la llegada al monte del gozo.

Alegría y a la vez, un sentimiento de vacío que nos inunda, o por lo menos a mi, de que ya los días esperanzadores de llegar a Santiago, han dejado de ser motivo.

Solo el pensamiento de volver, aún antes de haber llegado, dan este punto de satisfacción. Y mientras subes hacia la Catedral, caminando por la Rua de los Peregrinos, ya planificas tú nuevo Camino.

Este ha sido el primero en Guatemala, y se que va a ser el último……

Pero Compostela me espera, para que haga ofrenda al Apóstol de este mi Camino a Santiago de Atitlán.


 
Amanece como lo hace en esta zona, de repente. La ansiedad me lleva a cargar a la mochila rápidamente y lanzarme hacia el embarcadero, para cruzar el lago.

El cambio de orilla no dura más de veinte minutos, y a las horas de la mañana, la paz y calma están presentes en el ambiente.

Mi muda amiga, que no ha dejado de acompañarme, sentada en su asiento, esta absorta como yo a la espera de la llegada.

 







Llegamos al embarcadero de Santiago Atitlan, y orientándome por la lógica, tiro calle arriba. Mi paso es rápido, nervioso, ansioso y a la vez temeroso de lo que voy a encontrar. 

Embarcadero de Santiago Atitlan




 
 




 
Y así llego al Parque Central, ya solo unas escaleras me separan de la Iglesia, que ya diviso a lo alto.
La placa conmemorativa de la construcción nos da la fecha del 1547.

 
Iglesia de Santiago Apostol.



 






 
Sobre la portada de la Iglesia, la figura de Santiago, a caballo y blandiendo la espada, me hacen sentir que estoy al otro lado del mundo, en el Campo de las Estrellas.



 
Entro en la iglesia, y ya veo al Apóstol, que me recibe en silencio, majestuoso, y presidiendo el espacio.





Me arrodillo y apenas puedo dar las gracias por haber llegado a mi destino. Pensamientos y recuerdos familiares y de amigos, hacen de estos una oración, que va dirigida como petición para todos ellos al santo.




 
He llegado a Santiago de Atitlán.
Y el recuerdo siempre del "Ultreia, Suseia," ¡…animo, más allá, más arriba…!


....Si, mas allá vuelve a estar SANTIAGO DE COMPOSTELA…

(sigue)



2 comentarios:

  1. Emocionada llegada esta que describes en el que se refleja esos sentimientos vividos por muchos en las llegadas al Santiago de Compostela, pero ésta al otro lado del mar y por esa tierra tan querida para ti.

    Supongo que ese (sigue) será la conclusión definitiva, así que a la espera nos quedamos.

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  2. Pues si, Guillermo. Ya estoy en el fin de este Camino virtual, a Santiago Atitlan. Y como en todas las etapas anteriores, un emocionante y sorprendente encuentro, hacen que este convencido de que en el Camino no existen las casualidades.
    Es el Camino el que dirige nuestros pasos....pero eso, en la última entrada de este Camino a Santiago se vera.
    Un abrazo, compañero, un beso, amigo...

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YO MISMO

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DESCANSO EN EL CAMINO